¿Cómo Integrar el INGLÉS en tu Rutina Diaria y ver Resultados Increíbles?

Comunicarte en inglés con confianza y fluidez es una habilidad esencial en el mundo profesional actual. Para muchos profesionales, hablar inglés fluido no solo es una habilidad deseable, sino una necesidad crítica. Muchos adultos brillantes y talentosos han perdido oportunidades laborales por el miedo a expresarse en inglés. Sin embargo, la buena noticia es que con algunos ajustes en tu rutina diaria, puedes ver resultados increíbles y es posible superar estos obstáculos con esfuerzo, dedicación y práctica constante. 

En una ocasión un estudiante me preguntó: "Profe, ¿cuántas horas al día debo dedicarle al inglés para hablarlo de manera fluida? Mi respuesta fue sencilla: "hablar inglés con fluidez y seguridad es una meta alcanzable para cualquier persona que esté dispuesto a dedicar tiempo y esfuerzo. Integrar el aprendizaje del inglés en tu rutina diaria no solo te ayudará a mejorar tus habilidades lingüísticas, sino que también abrirá nuevas oportunidades laborales y personales. Por lo que, en esta entrada del Blog te comparto tres consejos basados en la psicología y la neurolingüística para integrar el inglés en tu vida cotidiana. 

1. Dedica Tiempo Diario a la Práctica Activa: 

Uno de los mayores obstáculos para aprender un nuevo idioma es la falta de tiempo. Sin embargo, dedicar al menos 20 minutos diarios a la práctica activa puede hacer una gran diferencia en tu proceso de comunicarte en inglés. Hay que decidir en qué momento del día vas a practicar, por ejemplo: en la mañana, tarde o noche para que así puedas comenzar a desarrollar el hábito de practicar inglés activamente. La formación de hábitos es un proceso poderoso que puede transformar tu aprendizaje del inglés.

Según Charles Duhigg en su libro "El Poder de los Hábitos", el desarrollo de nuevos hábitos puede facilitar el aprendizaje y hacer que este sea más efectivo. Por lo que, comienza con pequeños pasos consistentes, como dedicar 10 a 15 minutos diarios a leer un artículo corto en inglés, escuchar un podcast o practicar vocabulario, incluso practicar en voz alta frente a un espejo puede ser beneficioso. Recuerda que, la consistencia es clave para aprender a comunicarte en inglés. Al mantener un hábito diario, tu cerebro se acostumbra a la actividad, haciendo que el aprendizaje sea más natural y menos tedioso.

2. Incorpora el Inglés en tu Trabajo:

Tu entorno laboral puede ser una excelente herramienta para mejorar tus habilidades y comunicarte en inglés. Si la empresa en donde trabajas tiene presencia internacional o trabaja con clientes extranjeros, aprovecha las reuniones y presentaciones para practicar tu inglés. Primero, prepara tus intervenciones con antelación para sentirte más seguro. Segundo, redacta correos electrónicos en inglés, esto te ayudará a mejorar tu redacción y a familiarizarte con el tono formal del idioma. Tercero, crea un entorno de inmersión en tu trabajo en donde solo hables, escuches, leas o escribas en inglés. Este enfoque no solo mejorará tus habilidades lingüísticas, sino que también aumentará tu confianza. La inmersión es una de las técnicas más efectivas para aprender un nuevo idioma. Según un estudio de la Universidad de Georgetown, la inmersión lingüística puede activar áreas específicas del cerebro, mejorando la fluidez y la comprensión. 

3. Mantén una Mentalidad Positiva y Persistente:

Aprender un idioma puede ser un desafío, pero mantener una mentalidad positiva y persistente es clave para el éxito y comunicarte en inglés. Comienza a cambiar tus pensamientos limitantes por positivos y ve los errores como una parte natural del proceso de aprendizaje. En lugar de desanimarte, utilízalos como una oportunidad para aprender y mejorar. Tony Robbins, experto en PNL, sugiere que visualizar el éxito y usar afirmaciones positivas pueden transformar tu actitud hacia el aprendizaje del inglés. La Programación Neurolingüística (PNL) es una herramienta poderosa para cambiar patrones de pensamiento y comportamiento. Por lo que, dedica unos minutos cada mañana a visualizarte hablando inglés con fluidez y confianza. Usa afirmaciones como "Soy capaz de hablar inglés con fluidez" o "Cada día mejoro mi inglés". Celebra cada logro, por pequeño que sea, esto te mantendrá motivado y enfocado. La PNL te ayuda a reprogramar tu cerebro para asociar el aprendizaje del inglés con experiencias positivas y exitosas.  Estas prácticas pueden cambiar tu mentalidad y eliminar el miedo y la ansiedad asociados con el aprendizaje del idioma.

Ahora te toca a ti: 

Integrar el inglés en tu rutina diaria puede parecer un desafío al principio, pero con estos consejos, estarás en el camino correcto para ver resultados sorprendentes. Recuerda que la consistencia, la inmersión y la práctica constante pueden transformar tu aprendizaje.

No dejes que el miedo te detenga. Da el primer paso hoy y comienza a practicar inglés diariamente. ¡Es el momento de transformar tu vida profesional y personal hablando inglés con seguridad!

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Te envio un abrazo a la distancia

Tu amiga y mentora, 

La Profe Naysa Lynn

Referencias

1. Duhigg, C. (2012). El Poder de los Hábitos. Editorial Random House.
2. Geogetown University Medical Center. (2010). Study on Immersion and Language Learning. Link.
3. Robbins, T. (2001). Awaken the Giant Within. Simon & Schuster.